Ha pasado tanto tiempo. Hay formas de saber como el tiempo pasa. Por ejemplo: pensando donde nos encontrabamos antes y donde nos encontramos ahora, también revisando las huellas del paso de la edad en nuestro rostro ( sonó muy comercial) y por último, teniendo un bebé.
Siento que J vino a arreglar mi vida, tanto así que ya ni me reconosco. A veces creo que morí y esta es mi segunda vida en la que todo es distinto. Todo funciona bien. Es verdad, me quejo a veces, pero son quejas tan banales. Todo pasó a ser secundario. Ahora soy lo que soy gracias a él. Él me hace ser yo. Él hizo que me reconciliara con mis padres, que volviera a hablar con mis amigos, que me empiecen a agradar las matemáticas, que encuentre armonía en el orden ( aún me falta en la puntualidad ), me dió valor, seguridad y me hizo concentrarme en las cosas importantes. Él me hace ser una versión mejor de mi misma y me da fuerzas para hacer las cosas bien.
J, algún día leeras esto, quizás a los 20, y debes saber que ya de bebé eras perfecto. Ya desde él 25 de mayo a las 13 hrs, en el Hospital Naval, empezaste a cambiar todo. Como un Huracán. Me sacudiste el alma. Y me hiciste otra. Una mejor. Bueno incluso de antes, en mi vientre.
Quizás con E nacimos para ser padre, siempre hablabamos de nuestro futuro, siempre nos proyectábamos, era nuestro pasatiempo. Lo es aún. No somos de vivir el presente, de estar en ramadas hasta tarde ( como mia vecinos en este momento) ni de quedar raja curaos. Sí somos de cocinar juntos, de manejar escuchando grandes compilaciones músicales, de estar hechados viendo tele y regaloneando. Y sí, siempre estuviste en nuestros planes y queremos que seas nuestro compañero de hobbies.
Ahora te veo bebé, vigilo tu sueño, y debo decir que no es nada facil ser madre. Sumandoles mi serie de hechos desafortunados en el Hospital por usar una sonda horrible. Pero has cambiado tanto todos los días. Si las personas somos mundos, tú de a poco vas forjando el tuyo. Soy tan feliz de que estés con nosotros, de hacer todo lo que necesites para que estés comodo y en paz. Amo ser mamá, ser la tuya.
Incluso siendo mamá he aprendido a valorar la mía, a entender el sacrificio que hacen. Así me he vuelto mas comprensiva. Y las relaciones con tu abuela han mejorado.
¿Qué viene ahora? Que salgan tus dientes y empieses a comer. Que gatees y camines. No te preocupes por nada. Tu familia es y será tu sombra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Piénsalo muy bien